Olga es una anciana que se ha quedado sola en su casa tras la partida de Marta, su nieta. Para que la tristeza no la ataque y poder dejar de lado las rencillas y los malos sabores de boca que los pleitos con su nieta le han dejado, empieza a escribirle cartas, sin estar convencida de poder entregárselas en persona a su nieta en el momento en que ella regrese de estudiar en Estado Unidos.
Una serie de confesiones en forma de epístola; un recuento de una vida y una serie de lecciones de vida sin caer en el sermón moralino, Susanna Tamaro a través de la voz de Olga nos deja una novela corta y bella.
Recomendable para los románticos empedernidos, particularmente ahora que la secuela “Escucha mi voz” ya está en las librerías. Y para que no digan que no hacemos lo necesario para que lean, se los dejamos en PDF aquí.
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